Dias de febrero

 Esta última semana ha sido muy movida y han pasado algunas cosas que han hecho que varíe un poco mi rutina e hizo que mejore mi estado de ánimo el cual estaba un poco bajoneado las últimas semanas sin motivo alguno, según mi yo interior.

Volví al trabajo y si bien no hubo mucha actividad al principio, me volví  quedar a cargo de la oficina y odio eso porque me convierte en algo así como una secretaria que tiene que estar pendiente de los pagos de servicios, envío y recepción de paquetería, rendición de cuentas y otras cosas más que no dejan mucho margen para realizar el trabajo por el que fuimos contratados.

Luego de eso, el calor infernal que ha comenzado a hacer y que me ha ocasionado dos o tres veces, pequeños golpes de calor que me hicieron reventar mi cabeza de dolor - cosa que no es muy común ya que no suelo tener dolores de cabeza- y mi pequeño ventilador que no se da abasto en mi pequeña oficina. Las salidas a campo son incomodas en esta época del año, estar entre el calor abrumador y el fresco aire acondicionado de la movilidad que utilizamos, hace que mi garganta se ponga un poco mal. 

Febrero comenzó algo intenso, enero me había sido algo esquivo para el tema relacionado a mi novela mental de la que ya les comenté y actualice desde hace algunos meses, pensé que poco a poco me iba pasando ese sentir pero nada me da resultado, el ver seguido a alguien hace que difícilmente quede fuera del día a día, lo complicado que es tenerla dentro de conversaciones, rutinas, salidas y en algo de trabajo.

Es complicado.

Son complicadas las fiestas de fin de año, cumpleaños, salidas los fines de semana y en mi caso, también es complicado despertar y que lo primero que piense cuando tengo mi cabeza apoyada en mi almohada sea en lo mismo que me tiene atormentado todo este tiempo. Espero que nunca pueda hablar dormido porque imagínense lo que podría ocasionar lo que pueda decir.

Así pasan mis días, amando a una y pensando en otra. Es raro.

Y las fechas especiales no ayudan, sobretodo San Valentín, este año me rompí la cabeza pensando en algún detalle que pueda considerarse especial y que ojala en algún momento de lo que me queda de vida pueda contar los entre telones de eso, sería divertido ya que me tomó mucho trabajo la elección y sobre todo la presentación que tuvo pero tenía que ser así para no levantar sospechas. Finalmente se cumplió el objetivo, al final todos contentos.

Ahora, siguiendo con mi rutina, vuelvo a la realidad aburrida y necesaria como es el trabajo, me programaron un viaje de una semana -menos mal que solo es una semana- a varias localidades de la sierra y espero poder despejar un poco la mente aunque al parecer todos esos días solo tendré una cosa en la cabeza, en el rinconcito apartado que decidí desde hace algunos meses conservar solo para mí y no hablar sobre ello con nadie más. Tal vez me funcione y dé la sensación de que ya me olvide o dejó de importar pero no volverán a saber que en verdad todo eso me atormenta día y noche.

Así pasaré mis días.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Gracias 2024

Parte de este juego

Second Life